Hidalgos en Yugueros

En una sociedad rural como era la de Yugueros y todos los pueblos de esta Montaña Leonesa convivían tres clases sociales: los pecheros, el estado eclesiástico y los hidalgos. Los nobles, abades u obispos, que eran la mayoría de las veces los dueños y poseedores de la jurisdicción, quedaban socialmente muy alejados.
Sabido es que en nuestras montañas y en toda la cordillera Cantábrica en general había muchos hidalgos y pueblos en que prácticamente todos sus habitantes lo eran. Ser hidalgo era una condición social que daba a sus miembros ciertos deberes como obligación de ir a la guerra cuando el rey lo mandase pero también ciertos privilegios como exenciones en el pago de ciertos impuestos, ni tenían obligación de alojar a tropas de paso en su territorio. En nuestra tierras hemos de suponer que ser hidalgo tampoco suponía ser más rico que los pecheros pero si daba una consideración y prestigio social. Tampoco se entraba en competencia con la alta nobleza, demasiado alejada en todos los sentidos pero si eran algo odiados por los Concejos por sus exenciones de impuestos, lo prueba los muchos pleitos entre los Concejos y sus moradores que para mantener la pretendida hidalguía llegaban con sus casos hasta la Real Chancillería de Valladolid a fin de librarse de impuestos y no contribuir a la hacienda local. Como nuestras tierras nunca fueron ricas y parece que la mayoría de sus habitantes presumían de hidalguía, no creo que hubiese tensiones sociales de importancia y convivirían pacíficamente pecheros e hidalgos.
¿Cómo se accedía a este estado social de hidalguía? Pues de varias formas: Podía ser por derechos de sangre, por herencia de padre, así como los hidalgos por los cuatro costados porque hidalgos ya fueron sus abuelos paternos y maternos. El hidalgo que conseguía su condición por haber pleiteado y probado serlo por herencia era el de ejecutoria que se diferencia del hidalgo de privilegio que es quien lo compra o por merced real. Había otro tipo de hidalgo llamado de gotera que sólo lo era en su pueblo pero perdía sus derechos al cambiar de domicilio. También se era hidalgo por tener siete hijos varones consecutivos en legítimo matrimonio, era el hidalgo de bragueta. Algunos tipos de hidalguía eran solo vitalicios y no se trasmitían a herederos. Todo esto de hidalgos y pecheros se perdió a lo largo del siglo XIX.

Sabemos que en Yugueros había muchos hidalgos por varios documentos. Uno es una Real Cédula de 1723 dada en tiempos de S.M. Felipe V por la cual y a instancias del Concejo de Yugueros, se exime al pueblo del pago del impuesto de milicias porque el estado general se reducía entonces a un anciano y una viuda, ambos pobres. El impuesto era de ciento sesenta y cinco reales de vellón dada la situación estas cargas “han caído en el estado hijosdalgo como consta en información que se presenta” .
La respuesta a la petición de Yugueros dice así: “Para que en el Lugar de Yugueros no se reparta el servicio de milicias mediante no tenga vecindad del estado general y justifique no tenerla”. Se da cuenta de ello a la Superintendencia, Contaduría y al Administrador General Juez mero ejecutor de rentas reales y servicio de millones de la Cuidad de León. Este derecho exigía justificación todos los años.

Escudo De Casa de Hidalgos que había en Yugueros y hoy no localizado.

Se supone que dentro del pueblo todo el mundo sabía quién era hidalgo y sus derechos pero el problema surgía cuando se cambiaba de pueblo y por ello no faltan pleitos en la Real Chancillería de la Ciudad de Valladolid de personas originarias de Yugueros que establecidas en otro vecindario luchan porque se reconozcan sus derechos.
Así se conoce el pleito que entabló Antonio García Vecino de Modino y originario de Yugueros, nacido el 1 de mayo de 1698, hijo de Antonio García y María de Ribera y lo ganó en 1722(1). Pedro del Río se estableció como vecino de Palacio de la Ribera, nacido en Yugueros el 18 de marzo de 1706 hijo de Bartolomé del Río y María de Caso. Su abuelo, García del Río fue de los primeros Del Río de Yugueros. Y por supuesto ganó el Pleito en 1730(2). Otro pleito, Tomás García de Vega, vecino de Corao (Cangas de Onís), nacido en Yugueros el 17 de marzo de 1731 e hijo de José García de Vega y C. Ángela García reconoció su calidad de hidalgo en 1757(3). Y Francisco Reyero del Río, nacido en Yugueros el 23 de abril de 1776, hijo de Roque y Micaela vio reconocida su hidalguía al hacerse vecino de Villapadierna. Otro pleito, Isidoro García, avecinado en Cubillas de Rueda, nacido en Yugueros el 26 de Abril de 1739, hijo de Pedro García y María García vio reconocido su derecho de hidalguía en 1779(4).
Estos son algunos casos aislados encontrados y seguros que habrá más y se conocerán a medida que se vayan informatizando los archivos de la Real Chancillería de Valladolid.

A. del Rio

(1) – Legajo 925. Nº 16. Expediente 7312.
(2) – Legajo 909. Nº 56. Expediente 16.362.
(3) – Legajo 953. Nº 9. Expediente 7.907.
(4) – Legajo 979. Nº 7. Expediente 7144.